Las últimas semanas han estado marcadas para el colectivo “Profesores organizados de Recoleta”, en función de apoyar a las y los jóvenes presos políticos del despertar de Chile de la primavera pasada, así como a sus familiares.
Son decenas de jóvenes que siguen presos o con procesos que se han extendido en el tiempo.
El profesor Patricio Meza Morales, representante gremial de la Comuna de Recoleta, nos cuenta de estas iniciativas que tienen un hito próximo, como es el 5 de octubre con una jornada internacional de un hecho que nos debiera de avergonzar como nación: la existencia masiva de la prisión política.
¿Qué iniciativas han tenido los docentes de Recoleta en que tú estás en favor de los jóvenes presos políticos de la revuelta de la primavera pasada?
Como Profesores Organizados de Recoleta, una de las primeras actividades solidarias con los presos políticos de la revuelta, fue poder conectarnos con organizaciones como la Agrupación de familiares de Presos Políticos de Santiago Uno, Módulo 12. Allí hay 25 compañeros detenidos que han ido saliendo de a poco. Hemos acompañado a los familiares de La Granja también.
Hemos generado vínculo y luego hemos podido apoyar en el visibilización en redes sociales desde nuestra organización, así como en apoyo económico e insumos que auto-gestionamos semanalmente. Todo esto para los temas legales, de difusión, entre otros.
¿Cómo han recibido el apoyo ellos mismos y sus familias?
Hubo una acogida emocionante. Yo fui a dejar ayuda y en esa oportunidad pudimos hablar con Nicolás que es uno de los prisioneros políticos, y su madre.
Ellos no han sido escuchados por muchas organizaciones políticas institucionales. Pero hoy es momento de destacar cómo nos estamos apoyando mutuamente, tal como ocurrió el año pasado con el profesor Roberto.
Por ejemplo: los jóvenes nos han enviado dibujos que ellos han creado en prisión y eso ha sido muy emocionante.
¿Cuáles son sus principales demandas hoy en día?
Son simples: hay juicios con pruebas que no son concluyentes, como ocurrió con Francisco Hernández. Los abogados de fiscalía no han estado a la altura para su defensa según nos cuentan. Hay pruebas químicas que no han dado positivo, etc.
En síntesis, se exige juicio justo y que las medidas cautelares que se dictan, puedan ser sobrellevadas en el hogar.
¿Qué puede hacer el profesorado para apoyar esta causa?
Debe clarificar su postura, a todo nivel, frente a las demandas de los familiares de las y los pres@s polític@s tras la revuelta.
También podemos apoyar mucho en visibilizar por nuestras redes, esta temática.
Por otro lado está el apoyo económico a estas familias afectadas.
Y por último creo que el ámbito sicológico y emocional es clave, pues los jóvenes que están en prisiones de todo Chile, así como sus familias, lo están pasando pésimo. En ese plano podríamos hacer un gran aporte.